Si hay una profesión importante, que sirve de base para crear una sociedad más democrática, más justa y más culta, esa es sin duda la de Maestra o Maestro.
Todas y todos nos hemos acompañado de ellos, nos hemos nutrido de ellos y hemos colaborado con ellos. No hay mejores compañeros de trabajo.
Las maestras y maestros son gente colaboradora, cooperativa, poco protagonista y muy agradable para trabajar. Acostumbrados a ser poco valorados, los maestros suelen ser humildes en su día a día, sin percibir a veces la importancia que tiene su tarea, su función. La gran mayoría disfruta con su trabajo, les gusta, se divierten educando y preparando a nuestros hijas e hijos.
Y hoy, que es el Día del Maestro, aprovechamos para reivindicar mayor prestigio para esta profesión. Profesión de la que depende en gran parte el futuro de nuestra sociedad.
Gracias maestras, gracias, maestros. Gracias por estar ahí y por ir a trabajar con entusiasmo todos los días.
¡Felicidades!
Nota histórica
En España celebramos el Día del docente en honor a San José de Calasanz, un sacerdote y pedagogo considerado como precursor de la educación moderna.
José de Calasanz Gastón (Peralta de la Sal, 11 de septiembre de 1556 o de 1557 - Roma, 25 de agosto de 1648) fue un firme defensor de la enseñanza gratuita universal y uno de los primeros maestros en plantear una formación profesional.
Este aragonés fundó en el siglo XVII la primera escuela cristiana popular y gratuita en Europa, conocida como las Escuelas Pías. Estas se adelantaron incluso a la Real Academia Española en la reforma de la caligrafía y de las normas ortográficas de la lengua castellana.
También fueron las primeras en Europa que pusieron en práctica los métodos de enseñanza mutua y simultánea, realzando la figura de los docentes como centro de la educación primaria.
Así mismo, luchó por que en cada país se utilizase la lengua nacional además del latín, idioma en el que se instruía en aquellos tiempos. Para ello, envió más de 10.000 misivas alrededor de toda Europa con el objetivo de ganar adeptos a su causa.